LRH 36.3.pdf
Documento Adobe Acrobat 165.2 KB

 

LA IDENTIDAD EN LA HISTORIA DE LOS PUEBLOS DE GUINEA ECUATORIAL

 

ADJOA Nathalie Chiyé épouse KESSÉ* [1] 

KOUAKOU Kouamé Romaric*[2]  

 

 

RESUMEN.

En este artículo, se realiza un estudio sobre los pueblos de Guinea Ecuatorial, su historia y cómo perciben la identidad nacional en sus hábitos y costumbres. Esta temática hace hincapié sobre todo en el proceso de poblamiento de Guinea Ecuatorial y nos desvela cómo los grupos étnicos están repartidos en el territorio nacional. Más allá de esta particularidad ecuatoguineana, se revela el caso generalizado de África con sus problemas de conflictos étnicos, de la difícil aplicación y realización del sistema democrático en los países negro-africanos entre otros. De ahí, surgen tentativas de resolución de éstos con enfoque en el problema de la democracia durante los foros y conferencias sobre la gobernabilidad en los Estados de África.

Palabras claves: Identidad – Historia – Pueblos – Cultura – Guinea Ecuatorial.  

 

INTRODUCCIÓN

Siendo un país pequeño situado a las orillas del Golfo de Guinea, en la costa oeste de África, muchas veces Guinea Ecuatorial pasa desapercibida. Agobiada al norte por Camerún, limita al sur y al este con Gabón, y al oeste con el Océano Atlántico. De acuerdo con las estadísticas de noviembre de 2013, el país tiene una población de 704.001 habitantes y una superficie de 28 051 km² (Instituto Fomento de la región de Murcia 2013: 6)[3]. La disposición territorial es dispersa, constituida por una parte continental llamada Río Muni con la mayor ciudad Bata y de una parte insular, la Isla de Bioko (antes denominada Santa Isabel), con la capital Malabo, que se encuentra a 230 kilómetros distancia del continente. A estos se añaden la Isla de Annobón, al sur de São Tomé y Príncipe, las islas Corisco y Elobeyes.

Por lo tocante a su historia propia, cabe decir que la historia de Guinea Ecuatorial no se caracteriza por guerras y hechos sangrientos que condujeron a su independencia. En efecto, su pasado se puede trazar desde 1471 con el descubrimiento de la Isla de Annobón por los marineros portugueses. En el siglo XV Portugal realizó expediciones para la conquista de varios territorios africanos. En el siguiente año, “el explorador portugués Fernando Poo descubrió la Isla Bioko de hoy, a la cual llamó la Isla Formosa (hermosa en portugués)” (Morgades 2004). Entonces, todo el siglo XV fue marcado por disputas entre Castilla y Portugal por los territorios africanos. A través del Tratado de Toledo, Portugal obtuvo las regiones del Sur del Río de Oro y España se quedó con Canarias y con un área sahariana. La insatisfacción de España encontró solución en un nuevo pacto, el Tratado de Ildefonso de 1777, ratificado el año siguiente a través del Tratado de El Pardo. Para España, la importancia de este nuevo pacto consistía en obtener la Isla de Fernando Poo, Annobón y Corisco (el conjunto de islas que forman Guinea Ecuatorial de hoy), mientras que Portugal recibía la Colonia de Sacramento en Uruguay. De esta manera, España tenía acceso al Golfo de Guinea, que era entonces el punto de distribución de los esclavos negros en América Latina, pero también “al establecimiento de puertos intermediarios entre la Metrópoli y Filipinas” (Quilis 1995: 12).  

Por otra parte, el proceso de la colonización española empezó ante todo en Fernando Poo y en la Isla de Annobón, donde los españoles llegaron por primera vez. La parte continental, Río Muni estuvo por mucho tiempo bajo observación francesa, ya que todos los países a su alrededor eran colonias francesas. A partir de 1900, a través del Tratado de París, Francia renunció a sus proyectos de adjuntar la parte continental de Guinea a sus territorios, y España empezó finalmente la colonización en el continente.

En 1963, España concedió la autonomía de ambas regiones, de Fernando Poo y de Río Muni de acuerdo con la ley de junio 1959 [4], el territorio de Guinea es dividido en dos: Fernando Poo y Río Muni (Quilis 1995: 13). Fue solo en 1968, más precisamente el 12 de octubre cuando Guinea Ecuatorial se independizó bajo su primer presidente Francisco Macías Nguema, quien poco después de su elección, instauró  un régimen, durante el cual el español fue prohibido por siete años. Desde entonces, el país sufrió las duras realidades de aquel régimen hasta 1979, fecha en la cual se produjo el famoso golpe de libertad, golpe de estado perpetrado el 3 de agosto  que derrocó al presidente Macías Nguema  y vio la llegada al poder de Teodoro Obiang Nguema Mbasogo quien siguió gobernando el país hasta hoy.

Referente a la población del país, huelga decir que Guinea Ecuatorial consta de una multiplicidad de pueblos que forman parte del grupo bantú[5], grupo étnico mayoritario que domina casi toda la parte del Golfo de Guinea desde el Gabón, el Camerún hasta llegar en Guinea Ecuatorial. Pese a la gran variedad étnica y cultural que comparte territorio, y a diferencia de lo que sucede lamentablemente en otros países de África; en Guinea Ecuatorial a día de hoy, las diferentes culturas, o sea los distintos pueblos, conviven entre sí en plena paz, sin problemas étnicos ni enfrentamientos. De ahí, hablar de la historia de los pueblos de este país es hablar de la historia del país mismo. Desde entonces, ¿Cuáles son los rasgos de los pueblos de Guinea Ecuatorial en toda su diversidad? ¿Cuál es la historia de estos pueblos y su compromiso ante la readquisición de su identidad nacional? En el presente artículo, nos incumbirá contestar a estas diferentes preguntas.

 

I / LOS PUEBLOS DE GUINEA ECUATORIAL

1)      La nomenclatura de los pueblos de Guinea Ecuatorial

Casi la totalidad de la población con excepción de los pigmeos pertenece al pueblo bantú. Como ya lo hemos dicho, este grupo cubre todo el África central y abarca países como Camerún, Gabón y Guinea Ecuatorial de cuyos pueblos se trata. Éstos, diversos y sus peculiaridades propias representan la base del acervo cultural de este país. Entonces, se les puede dividir en los siguientes grupos:

Ø  Los fangs: forman la etnia más numerosa (80% de la población de Guinea Ecuatorial y 72% de la población en la región continental [6]). Tradicionalmente, su convivencia se estructura en familias, clanes y tribus relativamente autóctonos. Su sociedad es de tipo patriarcal y la descendencia se transmite por los varones; de ahí la importancia del padre, del tío, del primogénito. Se destacan también por su arte de escultura donde predomina el trabajo de la madera con las máscaras. Así, las estatuas rituales fang son apreciadas en el mundo entero yendo hasta inspirar a los cubistas y a numerosos pintores del siglo XX como Picasso o Matisse[7].

Ø  Los bubis: (15% de la población[8]) formando parte de los bantúes de la llamada “civilización del ñame” que se desarrolló en tiempos prehistóricos en la cuenca del lago Chad, se ubican en la isla Bioko. Son seguramente los primeros ocupantes de la isla y son originarios de Camerún. Su sociedad se estructura de forma de reino antes de la llegada de los europeos y este reino se mantuvo hasta el final del periodo colonial. Practican una religión de tipo monoteísta y en sus ceremonias aún siguen muy arraigadas la música, la danza y los cantos tradicionales pese al impacto del catolicismo.

Ø  Los pigmeos: en Guinea Ecuatorial, se les suele denominar Beyeles y Bokouings. Viven en pequeños grupos de 30 a 50 personas en la selva ecuatorial y en campamentos temporales, y se dedican a la caza y a la recolección de raíces y frutas salvajes. Además, son considerados los primeros habitantes de África.

Ø  Los ndowès: son un pueblo minoritario compuesto de numerosas etnias tales como los kombe, los bujeba, los bapuku, los balenke, los enviko y los venga. Su organización social está jerarquizada en familias, pueblos, linajes y clanes. Llegaron probablemente a Río Muni con los fang en los siglos XII y XIII y ocuparon la costa; lo que les valió el nombre de “playeros”, es decir los habitantes de la playa.

Ø  Los bisios: proceden de Camerún. Son poco numerosos y emigraron en el siglo XVI hacia las regiones cercanas del litoral de la región continental vía el río Ntem.

Ø  Los fernandinos y criollos: constituyen una burguesía de terratenientes y comerciantes que vivieron mucho tiempo en la capital y eran descendientes mestizos de liberianos y sierra leoneses que vinieron a lo largo de los siglos  a trabajar  en las plantaciones de la isla Bioko.

Ø  Los annoboneses: como lo indica su nombre, se encuentran en la isla de Annobón y son una mezcla de portugueses, españoles y esclavos descendientes de africanos. Tradicionalmente han sido pescadores ya que la agricultura es escasa en la isla al tratarse de una tierra volcánica. Usan unas canoas conocidas como cayucos, hechas de madera de ceiba. El grueso de los annoboneses dominan el dialecto Fà d’ambô que es un criollo portugués mezclado con español.

 

2)      Estudio de un caso particular: la cultura del grupo fang

Como enunciado más arriba, el pueblo fang constituye el grueso de la población de Guinea Ecuatorial. Se les puede encontrar sobre todo en la parte continental y dominan casi todos los sectores de actividad. Su historia atrae por todas las peripecias que conoce; de ahí nos vamos a interesar a aspectos precisos de su cultura para saber cómo su convivencia con los demás pueblos se hace en Guinea Ecuatorial.

2-a) Historia

La historia escrita informa que los fang son originarios del actual Sur del Sudán, de donde salieron para evitar la invasión musulmana; emigraron al suroeste llegando al Congo y Nigeria. Los antropólogos coinciden en que pertenecen al grupo étnico bantú,  y se mezclaron de forma muy intensa con sudaneses, etíopes y congoleses. Conocidos por ser valientes, fuertes y guerreros, consiguieron ocupar  y apropiarse de las zonas a las se vieron obligados a emigrar buscando solución a su forma de vida.

Además, su repartición territorial es tan larga que supera el área geográfico ecuatoguineano. Así, se les puede encontrar en cinco países entre los cuales Guinea Ecuatorial donde ocupan el 75% de la población, en Congo con el 38%, en Gabón con 33%, en Camerún con el 23% y en Santo Tomé con solo 10%; situación que nos hace  reflexionar lo poco apropiado que es considerar a la etnia de un país como una exclusiva  entidad[9]. En este sentido,  podemos aceptar el que el pueblo fang, tiene una entidad más cultural  que biológica.

 

2-b) El arte y las esculturas

El arte representa algo esencial e importante en la cultura de la sociedad fang. En efecto, el arte tradicional fang rebosa principalmente en las esculturas hechas de maderas, y con éste buscan no solo lo estético, la belleza, sino también algo más importante y  elevado: la perfección espiritual. Ahora la mayoría de los artistas están influenciados por las exigencias del mundo globalizado que exige piezas en serie sólo con fines comerciales. Las Figuras Humanas es la principal realización  artística. Realizadas con la intención de beneficiarse con su poder espiritual para remediar problemas físicos o psíquicos a las  personas, las más conocidas son las que eran utilizadas en rituales con la intención de conseguir la fertilidad de una pareja. Para ello, realizan figuras, masculinas y femeninas, en las que se enfatizan resaltando los genitales masculinos y los senos de la mujer. A ejemplo de lo que ocurre en muchos otros países de África, todo tipo de arte o esculturas en formas humanas tiene su significado en la sociedad e ilustran las relaciones de los hombres con sus antepasados.

 

2-c) Religión y tradición

  La religiosidad  revela una importancia capital para el pueblo fang, que lleva a considerar la religión como fundamental en su vida. Aquí en los fang, la religión se refiere a un conjunto de creencias que permiten concebir la vida incluyendo todas sus actividades por una causa espiritual, donde los antepasados van a actuar como mediadores entre los familiares y las instancias sagradas elevadas.  El intermediario familiar elegido cumplirá mejor su misión si el difunto fue una persona fértil durante su vida; de ahí los fang consideren una desgracia el hecho de que muera alguien que no ha sido fértil. Algo que transcurre en la novela Ekomo (1985) de María Nsue Angüe, obra en la que la escritora plantea el espinoso problema de  fertilidad encontrado en las mujeres. En efecto, en la sociedad fang, una mujer que lleva su existencia sin la felicidad de dar a luz lo sufre como una desgracia, una mala suerte no sólo para sí misma, sino también para su familia.

Por otra parte, la religión fang da culto a los espíritus; la familia recuerda y narra las realizaciones que en vida hicieron los antepasados y que desde su nuevo destino, siguen controlando sus vidas y velan por el bienestar de sus descendientes, y se facilita esta relación conservando los cráneos y los huesos más largos de sus antepasados, quienes poseen más poder de proporcionar  estabilidad en el hogar familiar, en primer lugar el padre y madre, seguidos de los tíos.  Por ello, dedican cuidado para conservar estos restos en unos delicados y especiales relicarios, se comienza esta especial colección  con un modelo pequeño y luego se van haciendo otros más grandes cuando tienen más cráneos, se guardan en un lugar oscuro de la casa[10].

 

II / CONFLICTOS ÉTNICOS: HACIA UNA LUCHA DE LOS NACIONALISMOS DE LOS PUEBLOS DE GUINEA ECUATORIAL

             La evolución de la economía mundial, a comienzos del siglo XXI ha supuesto la superación absoluta de las fronteras entre regiones, países y Estados. Actualmente no existe ningún país autárquico, ni es posible a ninguna colectividad mantenerse al margen de los movimientos económicos mundiales. Entonces es evidente que ningún grupo étnico puede desarrollarse sin la implicación de los demás. Pero en este proceso de afirmación y de posicionamiento, cada pueblo busca  afirmarse superior al otro de forma a dominarlo en todos los ámbitos; lo que resumimos en su nacionalismo [11]. Es en este contexto que se encuentran los pueblos de Guinea Ecuatorial comprometidos en una lucha nacionalista. He aquí a continuación los distintos nacionalismos en Guinea Ecuatorial.

 

1)      El nacionalismo bubi

 En lo que concierne los bubis, la tarea para recuperar la identidad se plasma en su nacionalismo; el cual pretende dar privilegio y preponderancia a la isla Bioko, territorio que les pertenece exclusivamente según dicen. En efecto, el grupo bubi reivindica un adueñamiento de su territorio (Bioko), pero al mismo tiempo no se enfrenta a la llegada de otros pueblos en este mismo. Sólo una gobernabilidad imparcial y equitativa que posibilita a cualquier grupo/pueblo izarse en la cabeza del país. En este contexto se inscribe la nueva corriente bubi, la que estipula lo bien fundado del advenimiento de un sistema federal de naciones como modelo de Estado que permitirá el concurso de todos los grupos étnicos de Guinea Ecuatorial en lo que Justo Bolekia Boleká ha denominado “cosa pública del Estado” (refiriéndose a la gestión del país); porque le permitirá defender su lengua, su cultura y su idiosincrasia que forman su identidad.

 

2)      El nacionalismo fang

En esta crisis identitaria que trasparece con la lucha de los nacionalismos, los fang son los que desarrollan un nacionalismo radical y muy tribal. El nacionalismo fang parte de la idea de la mayoría numérica para imponer una cultura única. Estamos ante un nacionalismo absorbente y sectario o regional. Conscientes de su superioridad numérica, quieren imponer su voluntad a los demás grupos al dominarlos tal como ocurrió en la historia del país desde su acceso a la independencia en 1968 (12 de octubre). En efecto, al acceder a la Magistratura Suprema, Francisco Macías Nguema, un fang, muy pronto sumió el país en una intensa y feroz dictadura, ralentizando entonces los dominios de expresión cultural, literaria y aun los sectores políticos y económicos de los que solo él tiene pleno poder. Duró aquel periodo desde 1968 hasta 1979 cuando su primo Teodoro Obiang Nguema consiguió derrocarle gracias a un golpe de Estado. Este último siguió gobernando el país hasta hoy acordando favores mayoritariamente al pueblo fang. En definitiva el sistema ha acabado marginando a más del 95% de la población, cierto es que en diferentes niveles de exclusión. 

 

3)      El nacionalismo annobonés

Por lo tocante al nacionalismo annobonés, se destaca de los demás por su carácter doble: se encuentra a caballo entre el nacionalismo ndowè que es integrador y el bubi. Los annoboneses defienden la unidad nacional. En efecto, abogan por una estructura de país a partir de la pluralidad étnica, caso contrario estarán más próximos a las tesis de los bubis. Este doble posicionamiento está relacionado con sus orígenes y sobre todo con la evolución política del país desde la colonia. Siendo originalmente un pueblo disperso ya que los forman portugueses y españoles, valoran la unidad nacional o unidad del país a partir de la diversidad y pluralidad de los pueblos; toda idea que desemboca en una convivencia en paz y armonía de distintos grupos étnicos dentro de un mismo espacio geográfico. Aunque padezcan los annoboneses a veces discriminaciones y marginación por parte del gobierno, el nacionalismo annobonés se cuestiona la viabilidad del actual modelo de Estado con un posicionamiento claro: “Si somos parte del todo, también queremos participar de los beneficios que genera ese todo; de no ser así, debemos y tenemos el derecho de organizarnos libremente”. Su modelo de Estado ajustado a la pluralidad étnica es el Federal en cuatro estaduales: Annobón, Bioko, Litoral e Interior (Partido Democrático Federal de Guinea Ecuatorial)[12].

 

III / PROPUESTA DE GOBERNABILIDAD PARA EL FUTURO DE LOS PUEBLOS DE GUINEA ECUATORIAL

1)      El derecho de los pueblos y de las minorías

“Las minorías nacionales tienen el derecho de administrar soberanamente el eje central de su identidad: su cultura. Esto incluye asuntos de idioma, educación, tradiciones culturales y credo, que es el factor crítico de su identidad”.  Se puede concluir por lo tanto que en Guinea Ecuatorial ningún pueblo, etnia o región es soberano. El esquema actual de servidumbre a favor de una minoría en el poder es justo lo contrario de lo que debe ser una sociedad plural y tolerante, frente al cual nadie se siente legitimado sobre otros y nada debe comprometer al resto a aceptar sus dictados; es el caso de la típica dominación de los fang en todos los ámbitos de la sociedad (cultura, economía, política en especial) sobre los demás grupos étnicos. Este análisis hubiera sido innecesario si los gestores de Guinea Ecuatorial gobernaran con criterios igualitarios. Eso no es así porque la cultura tribal que invade a sus mandatarios y los lazos familiares que sobreviven en estos ambientes les impedirán proyectar sus mentes hacia fuera. En estas condiciones los antagonismos étnicos juntamente con esta visión sesgada de Estado no permitirán crear una idea de un Estado plural. “Las naciones cívicas, afirma Will Kymlicka, serán “neutrales” con respecto a las identidades etnoculturales de sus ciudadanos, y definirían la pertenencia nacional en términos de adhesión a ciertos principios de democracia y de justicia”. O sea que los principios de democracia, justicia e igualdad no se aparentan únicamente al partido que gobierna sino a todos los pueblos. De ahí, una invitación o más bien una oportunidad está dada a Guinea Ecuatorial para salir de esta falsa democracia en la que se halla presentemente.  

 

2)      La soberanía un derecho inherente de los pueblos

La soberanía de un pueblo o de una región no se crea, sencillamente es un derecho intrínseco que sea se ejerce sea no se ejerce. Si un pueblo no disfruta de su independencia simplemente es un pueblo sometido y le corresponde por derecho denunciar las injusticias de las que es objeto y por deber luchar por su liberación. Desde esta perspectiva, las reivindicaciones de las minorías no son una simple cuestión de capricho como se sostiene a menudo. Al contrario, la defensa de sus derechos y el fomento de cualquier unidad atómica están basados en los Derechos Humanos internacionalmente admitidos. Porque ninguna sociedad ni país puede llamarse una democracia si no reconoce, aplica y respeta también los derechos de las minorías. La libertad individual y la dignidad humana se postulan como la base de todos los derechos, un derecho universal e intrínseco al mismo hecho del ser humano. El hecho aquí es que Guinea se reclama soberano; la cual soberanía que sufre a existir ya que el grueso de las poblaciones padece discriminaciones, marginación e injusticias que lo impiden salir de esta letargia para intentar desarrollarse y aprovechar las riquezas desigualmente repartidas del país. Las sociedades modernas son cada vez más heterogéneas en términos raciales, étnicos, culturales, o religiosos, debido a esta diversidad, siempre habrá grupos mayoritarios y unas minorías. La lucha por la reafirmación (del poder o de la identidad) o simplemente por la supervivencia en uno u otro caso a menudo desemboca en conflictos cuyo arbitraje corresponde al poder central; el de todos y para todos. Es por lo que un Estado debe ser aquella estructura que dé amparo a todos sus ciudadanos y sensibilidades, independientemente de su condición o procedencia. Esto implica la obligación de los gobiernos de abstenerse de todos los intentos de asimilación coactiva y de proteger a las minorías contra otras formas de asimilación forzada. Porque dondequiera que existan minorías la mayoría debe respetar su ser diferente como parte integral y de su innato e inalienable derecho a ser diferentes y libres. Si estas reglas básicas se ignoran sistemáticamente, es cuando surgen recelos por el modelo y reivindicaciones nacionalistas o de identidad.

El fracaso del modelo Estado–Nación, en su afán de crear culturas únicas y los desequilibrios económicos mundiales, como consecuencia del pensamiento único, ha acelerado la idea de autogestión local y regional. El resurgimiento del nacionalismo étnico en la Europa del Este tras el fin de la guerra fría, los derechos de los indígenas en América latina o las reivindicaciones nacionalistas en la Europa Occidental, han contribuido en reabrir este debate, también en África, especialmente sobre el derecho de las minorías. Se observa además cómo en las democracias occidentales el derecho de estas minorías y grupos etnoculturales va siendo cada vez más una cuestión normativa. África por razones obvias no es una excepción, menos Guinea Ecuatorial, porque las sociedades africanas previo al hecho colonial (incluso posterior a él) se adecuan fundamentalmente sobre la base de sus valores culturales. Por su parte la dinámica internacional evoluciona hacia ese concepto de Estados libres, plurales e interculturales. Porque la libertad es diversidad y democracia. Es por lo que hay que caminar hacia formas de vida más tolerantes donde también las minorías, cualquiera que sea su dimensión, puedan sentirse cómodas y suficientemente representadas.

 

 

3)      La democracia

Lo más probable es que la situación no hubiera sido diferente si un Bonifacio Ondo Edu, algún ndowè, bubi o annobonés hubiese sido el Presidente de la Guinea Independiente. Porque el problema de este país es fundamentalmente social–étnico, aunque su solución requiera además herramientas políticas [13]. Cuando se independiza Guinea Ecuatorial el desencuentro entre etnias y regiones, y por lo tanto la fractura social, era de tal magnitud que cualquiera que hubiese sido el Presidente seguramente se habría amurallado con los suyos, y a resistir. Las prisas que dieron paso a su independencia prematura y unificada favorecieron después un sistema que ha castigado a casi todos. Por lo que hay que acabar con él. Una nueva reordenación de Estado a favor de la ciudadanía y en contra de la exclusión serán las grandes cuestiones que en el día después del nguemismo[14] se deben resolver como punto de partida hacia la democracia. Ésta se debe entender como aquella caja de herramientas que permitirá corregir los errores del pasado y proporcionar mecanismos adecuados para la construcción de un Estado multinacional.

Un sistema de “gobierno del pueblo, hecho para el pueblo, por el pueblo y responsable ante el pueblo” es el modelo defendido por Daniel Webster (1830) como el menos malo. A partir de aquí a este sistema se le bautizó como democracia por su cualidad de responder a las preferencias de los pueblos. La democracia –afirmó Churchill– “puede ser un sistema imperfecto o deficiente pero al menos permite que todos vivan en él”. La democracia también es:

Ø  Dignidad: El respeto a los derechos fundamentales de cualquier persona es la base sobre la que se debe sustentar cualquier ejercicio de justicia.

Ø  Diversidad: Es una característica inherente a la propia definición de Estado y al derecho de libre movilidad de las personas. A su vez, es lo que nos hace únicos (no tenemos por qué ser iguales, pero sí estar sujetos a las mismas reglas de juego) y nos permite examinar nuestra capacidad de tolerancia.

Ø  Diálogo: Esencial para llegar a acuerdos que a su vez darán paso a una sociedad justa. Digamos en este sentido que la democracia es un juego de equilibrios en el que todos deben ceder parte de sus posiciones estratégicas en beneficio del bien común. La negativa a esta cualidad, en una sociedad heterogénea y profunda, donde por otra parte los criterios étnico-regionales son más importantes, se entenderá como una pseudo-colonización hacia los excluidos.

Ø   Derecho a la autodeterminación: Tiene que ver con el derecho a la existencia humana, su libertad y con la defensa de su identidad. Por ser un derecho de los pueblos, les permitirá la libre elección de su gobierno y tener soberanía sobre sus recursos.

Ø  Desarrollo: La realización de toda persona, aquello que llaman empoderamiento, a partir de sus propias capacitaciones. Es la expresión suprema de la libertad humana y la fase última de la democracia. Una sociedad es demócrata si sus habitantes están en disposición de realizarse libremente conforme a las reglas de juego establecidas y a partir de sus capacidades.

Sin embargo, no todas las formas de organización y gobierno responden al mismo estilo de democracia. Cada pueblo o Estado debe adecuarlo a las particularidades de su población. Fundamentalmente hay dos posiciones de las que se pueden derivar otras formulaciones:

v  La democracia de las mayorías. Sus defensores afirman que es la que mejor responde a un modelo de gobierno del pueblo y para el pueblo. Goza de mayor aceptación y se defiende sobre todo en sociedades homogéneas o, en su caso, siempre que se puedan evitar vías de exclusión de las minorías.

v   Democracia de consenso. Sus partidarios consideran que las democracias de mayorías son excluyentes y altaneras. Porque la esencia fundamental de la democracia es que todos los que están afectados por una decisión deberán tener la oportunidad de participar en la toma de esa decisión de manera directa o a través de sus representantes elegidos. “Impedir que los grupos perdedores participen en la toma de decisiones –dice Artur Lewis– es una clara violación del significado primordial de democracia”.

 

4)      El consenso

La política llevada a cabo desde la independencia consiste en defender un Estado abstracto y con una cultura homogénea. De ahí que este tipo de Estado y las instituciones que lo sustentan haya perdido toda su legitimidad porque son incapaces de salvaguardar el principio de la neutralidad etnocultural que sustenta cualquier Estado plural. Uno de los ocho criterios que propone Robert A. Dahl para medir la efectividad de la democracia es el derecho a ser elegido. En Guinea Ecuatorial, la ausencia de una concepción ideológica impedirá cualquier tipo de gobierno dirigido por un candidato de etnia minoritaria. En consecuencia, el actual modelo de Estado no funciona; es excluyente. Es decir, si un político perteneciente al grupo minoritario, o a una determinada región, por la sencilla razón de serlo, no puede ser elegido o invitado a formar parte de los órganos de decisión o gestión, entonces estamos ante un sistema agotado. Fue mal concebido porque partió de bases equivocadas. Ahora cabe reformularlas. Además, las estructuras de un Estado no deben ser estáticas. No tienen por qué serlo. Han de ir acomodándose a la voluntad del pueblo que las hizo posible. Si durante la Conferencia Constitucional (Madrid, 1967) la “mayoría” de las naciones guineanas optaron por un Estado centralizado, es esa misma mayoría, habida cuenta de los nefastos resultados de casi cuatro décadas, la que ahora solicita la revisión de ese pacto.

Lo que pretendemos sacar a la palestra es la gobernabilidad del Estado de Guinea Ecuatorial. Un Estado cuyas instituciones sean capaces de maximizar el bienestar social de todos. Porque si aceptamos que el modelo actual es insolidario y genera ingobernabilidad, parece razonable construir otro marco de concentración socio–político que elimine la marginación y la violencia de la que es objeto gran parte de la población. Una fórmula, en definitiva, que permita consensuar la gobernabilidad y convivencia de todos. “La voluntad de las personas que forman una comunidad plural permitirá fórmulas para resolver controversias e incompatibilidades. Hará posible objetivos comunes sin dejar de preservar sus identidades respectivas”. Tomamos prestado el razonamiento político del Partido Federal Democrático de Guinea Ecuatorial. La fórmula democrática que permitirá corregir las imperfecciones del actual sistema será aquella que surja de un Pacto Social entre las diferentes naciones o etnias. Es decir una democracia de consenso, basado en el reconocimiento y el respeto de esa diversidad étnica y en la participación plural de todos. Permitirá maximizar la representatividad de la mayoría gobernante y responder al modelo del gobierno por y para los pueblos. En ese ejercicio se requiere, dejando al margen todos los movimientos y organizaciones políticas, sentar en pie de igualdad a annoboneses, bisio, bubis, fang y ndowè para consensuar entre todos un nuevo marco de interrelación. Porque la mayoría numérica no puede, ni debe, suplantar los derechos históricos de los pueblos. La política o políticos se limitarían a dar forma a esa voluntad plural. La democracia entendida en estos términos entraña una dimensión de relaciones e interlocución entre el gobierno y la sociedad civil a partir de un diálogo y negociación permanente entre los representantes regionales y sociales desde las bases[15].

 

CONCLUSIÓN

            La identidad en la historia de los pueblos de Guinea Ecuatorial resulta un tema mucho más amplio que parece. Abarca a la vez los conceptos de poblamiento, instalación territorial de los pueblos, nacionalismo, identidad y democracia con todo lo que la rodea. Los pueblos de Guinea Ecuatorial por la diversidad que los caracteriza representan la primera riqueza del patrimonio cultural del país; desde los portugueses, los españoles hasta llegar a los propios nativos es así como se hiciera el poblamiento de los países de África.

            Los fang, bubis, annoboneses, bisios, ndowè, fernandinos y pigmeos en su historia no han gozado del mismo privilegio; el cual privilegio se han apoderado de ello los fang, etnia mayoritaria del país, desde mucho tiempo.  Por ser los presidentes de origen fang, todos los ámbitos de la sociedad con los puestos respectivos están en las manos de este grupo étnico que ejerce plena dominación y excesivo poder hasta tal punto que la democracia, sistema político imperante en el país es inexistente. Todo hecho que desemboca en una profunda crisis de identidad y conflictos étnicos; de cuyas consecuencias hay que ir más allá. Así  en esta tarea, principios como los del derecho de los pueblos y las minorías y la soberanía deben ser algo real y verdadera para que el país pueda alcanzar su ideal de desarrollo y  paz.

 

NOTAS BIBLIOGRÁFICAS Y FUENTES DOCUMENTALES

1)      Alicia Campos Serrano, “Nacionalismo anticolonial en Guinea Ecuatorial: de españoles a guineanos”, Araucaria n°9, pp: 175-195.

2)      “Aportaciones para la reflexión antropológica, filosófica y literaria”, consultado in  https://lanaveva.wordpress.com/2009/07/14/los-fang-un-pueblo-y-su-cultura/

3)      Artur LEWIS, “sobre la “democracia” mayoritaria y consensual”, 2 de enero de 2011,cincuenta y tres días, consultado in https://cincuentaytresdias.blogspot.co.ke/2011/01/sobre-la-democracia-mayoritaria-y.html?m=1 

4)      « conferencia constitucional de Guinea Ecuatorial de 1967-1968 », consultado in https://es.m.wikipedia.org/wiki/conferencia_constitucion_de_guinea_ecuatorial_de_1967-1968

5)      Elena Magdalena Chirila, “Identidad lingüística en Guinea Ecuatorial: diglosia y actitudes lingüísticas ante el español”, Universidad de Bergen, 2015, 122 páginas.

6)      “Guinea Ecuatorial”,pp: 39-138, consultado in http://riviste.unimi.it/index.php/tintas

7)      “historia de Guinea Ecuatorial”, consultado in http://www.asodegue.org/hdofm.htm

8)      https://www.ecured.cu/Guinea_Ecuatorial

9)      Instituto de Fomento de la región de Murcia (2014): “Informe del país Guinea Ecuatorial (noviembre 2013)”, consultado in http://www.institutofomentomurcia.es/c/document_library/get_file?uuid=c750b8ef-287d4985-80c7-288ea035afbb&groupId=10166

10)  María del Sagrario Diaz-Pinés Prieto, “Literatura hispanoafricana de Guinea Ecuatorial: explorando las trayectorias nómades de César A. Mba Abogo”, Universidad de León, 2014, 119 páginas.

11)  María Teresa Abaga Envó, “Una aportación al estudio del cuento fang de Guinea Ecuatorial en lengua española”, 173 páginas

12)  MUAKUKU Rondo Igambo, “conflictos étnicos y gobernabilidad : Guinea Ecuatorial”, 01 junio 2006, consultado in http://www.ojosdepapel.com/Index.aspx?article_id=2415

13)  Susana Castillo Rodríguez, “Revista de Antropología social”, consultado in http://dx.doi.org/10.5209/RASO.53973

 

 



[1] * Universidad Alassane Ouattara, Bouaké, Costa de Marfil. 

Profesora del departamento de estudios ibéricos africanos y latinoamericanos nchiye@yahoo.fr

[2] Universidad Alassane Ouattara, Bouaké, Costa de Marfil.

Estudiante, master2 de estudios africanos kouakouromaric3@gmail.com

[3] Instituto de Fomento de la región de Murcia (2014): “Informe del país Guinea Ecuatorial (noviembre 2013)” (Internet). in http://www.institutofomentomurcia.es/c/document_library/get_file?uuid=c750b8ef-287d4985-80c7-288ea035afbb&groupId=10166

[4] La ley del 30 de junio de 1959 estipula el equipamiento de los derechos de los habitantes de Fernando Poo y Rio Muni con los de la Metrópoli y reconoce a Fernando Poo y Rio Muni como dos provincias distintas

[5] A esta denominación pertenecen más de 70 millones de individuos que se extienden a lo largo del África central, oriental y austral.

[6] In https://www.ecured.cu/Guinea_Ecuatorial consultado el 16/05/2017 

[7] In https://www.ecured.cu/Guinea_Ecuatorial consultado el 16/05/2017 

[8] Ídem

[9] “Aportaciones para la reflexión antropológica, filosófica y literaria” in

 https://lanaveva.wordpress.com/2009/07/14/los-fang-un-pueblo-y-su-cultura/ consultado el 05/05/2017

[10] “Aportaciones para la reflexión antropológica, filosófica y literaria” in

 https://lanaveva.wordpress.com/2009/07/14/los-fang-un-pueblo-y-su-cultura/ consultado el 05/05/2017

[11] preconiza la necesidad de establecer diferentes gobiernos acordes con el “espíritu” particular de cada comunidad. Surgido del movimiento romántico alemán, fue desarrollado en el siglo XIX con el nacimiento de reivindicaciones nacionalistas.

[12] Muakuku Rondo Igambo, « conflictos étnicos y gobernabilidad : Guinea Ecuatorial », 01 junio 2006, in http://www.ojosdepapel.com/Index.aspx?article_id=2415 consultado el 18/05/2017

[13] Muakuku Rondo Igambo, « conflictos étnicos y gobernabilidad : Guinea Ecuatorial », 01 junio 2006, in http://www.ojosdepapel.com/Index.aspx?article_id=2415  consultado el 18/05/2017

[14] Es el nombre dado al periodo  durante el cual Guinea Ecuatorial experimentó una de las más feroces dictaduras del continente africano inmediatamente después de haber adquirido su independencia. Este periodo fue terrible tanto para los guineanos como para los españoles que vivían allí, a causa de los asesinatos que se hicieron moneda corriente. En pocas palabras, por “nguemismo”entendemos la dictadura monoétnica de Francisco Macías Nguema que secuestró la realidad de Guinea Ecuatorial durante casi once años (1968-1979)

[15] Muakuku Rondo Igambo, « conflictos étnicos y gobernabilidad : Guinea Ecuatorial », 01 junio 2006, in http://www.ojosdepapel.com/Index.aspx?article_id=2415 consultado el 18/05/2017

LA RAZÓN HISTÓRICA. REVISTA HISPANOAMERICANA DE HISTORIA DE LAS IDEAS

¿Quiénes somos?. 428 AUTORES y 65.000 LECTORES

-Impacto: en JCR (Q3/History)

-Calidad: en Google Scholar Metrics y en Emerging Sources Citation Index con JCI 0.17

-Difusión: reconocida internacionalmente por DOAJ y ERIHPLUS

Búsqueda en la Revista

Números publicados [2007-2024]

Nº62 EL GRAN SENTIMIENTO

Nº61. ENSAYOS HISTÓRICOS

Nº 60. SOBERANÍAS

Nº 59. MUTACIONES FACTIBLES

Nº 58. HISTORIA Y JUSTICIAS

Nº57. CONQUISTAS

Nº56. LECCIONES

Nº55. PALABRAS CONFLICTIVAS

Nº54. DEFINICIONES HISTÓRICAS

Nº53. ROSTROS HISTÓRICOS

Nº52. LUCES Y SOMBRAS

Nº51. MIEDOS PASADOS Y PRESENTES

Nº50. DINÁMICAS HISTÓRICAS

Nº49. CAMBIO Y CONTINUIDAD

Nº48. SENTIDO COMÚN

Nº47. PASADO PRESENTE

Nº 46. LA CRISIS DEL CORONAVIRUS

Edición

Garantía de Calidad

Diseño y comunicación

Colaboración

En la red

Libros de la Colección

Servicios de interactividad con el lector.

Atención: Los campos marcados con * son obligatorios.